martes, 5 de mayo de 2015

EL ESCULTISMO MÁS ALLÁ DE MIKAEL I: EXPORTANDO A OTROS GRUPOS

HOY ENTREVISTAMOS A… ÁNGELA ETAYO, EVA ETAYO, MÓNICA MORAZA, CELIA SAINZ E IRATI ZUBIETA


Ángela, Eva, Celia e Irati con sus compañeros de la rama Ranger. Monica se unió un año después.

Con la entrevista de hoy, comenzamos un nuevo ciclo de entrevistas en las que queremos mostraros que el trabajo de Mikael en el escultismo va mucho más allá del trabajo en nuestro grupo. Y para comenzar tengo el placer de presentaros a cinco chicas de las cuales tuve el placer de ser su monitor. Al acabar la ruta ellas querían ser monitoras scout y como yo en su día, han tenido la oportunidad de hacerlo en un grupo diferente al que han pasado el resto de su vida. Ángela en Baracea, Eva en la Vª Tropa, Mónica en Jairoi, Celia en San Andrés y finalmente Irati en Dendari Izar hicieron las mochilas y emprendieron una nueva aventura que sin duda les enriquece a ellas y al escultimo navarro en general. Veamos que opinan ellas.

¿Cómo fue la decisión de probar suerte como monitoras en otros grupos?

Ángela: Realmente la decisión la tomaron nuestras monitoras y supongo que todo el kraal porque no nos dieron otra opción. Lo que nos planteaban era estar en otros grupos durante el primer semestre hasta el campamento de Navidad y a partir de ahí nosotras decidíamos si quedarnos o volver a Mikael. Para ser sincera, en un principio la idea no nos motivó mucho pero ¡quién nos iba a decir que casi dos años después ahí íbamos a estar cada una en un grupo dado guerra!

Eva: Fue una decisión tomada por nuestras monitoras, aunque a la vuelta de Seeonee estábamos bastante dispuestas a probar experiencias en nuevos grupos. La idea era estar unos tres meses y luego, si eso, volver a Mikael.

Mónica: La decisión la teníamos ya un poco en mente desde tiempo atrás. Ya nos habían avisado que se estaba pensando desde la asociación en lo de mandar a otros grupos al acabar la ruta, y más o menos ya lo sabíamos. La verdad es que en un principio la idea no nos convencía mucho, un poco por miedo de ir nuevo a un grupo donde no conoces a la gente, o también por comodidad, ya que es mucho más cómodo quedarte en tu grupo donde ya conoces a todo el mundo y donde la relación con la gente ya era buena.

Celia: Pues no tuvimos elección, porque nos dijeron que si queríamos ser monitoras teníamos que irnos a otro grupo. Y no lo voy a negar… la idea de abandonar Mikael no me gustó nada. Principalmente porque me iba a separar, como quien dice, de esas personas que a día de hoy se han convertido en grandes compañeras de aventuras; y porque Mikael ha sido mi segunda casa desde que tenía 8 años.

Irati: Finalizando la etapa de rutas nuestras monitoras nos propusieron ir a otros grupos a probar. Al principio reconozco que no me hizo mucha gracia ya que después de haber estado 11 años en Mikael  quería probar ahí. Con quienes había compartido toda mi vida scout y eran mis compañeras de rama. Pero también pensé que era buena idea probar y conocer nuevos compañeras.

¿Por qué elegisteis el grupo en el que estáis?

Ángela: ¡Esa tampoco fue decisión nuestra! Ahora que estoy escribiendo me está entrando la intriga de cómo Edurne y Yanire se les ocurrió esta idea… Pero bueno eso es otro tema. Recuerdo como si fuera ayer el sábado (como no, en la plaza de la cruz) que nos dijeron a cada una cual iba a ser nuestro nuevo grupo. Cada una según su personalidad y si éramos más o menos compatibles con el grupo, cosa que nos hizo bastante gracia en su momento pero parece que tenían razón…

Eva: Tampoco fue una decisión nuestra, sino nuestras monitoras que teniendo en cuenta cercanías a las universidades o a nuestra casa, personalidad… nos colocaron un poco a ciegas. Tengo que decir que no tuvieron muy en cuenta nuestras preferencias, acertando a la larga bastante en su decisión. Un sábado en la plaza de la cruz de la que ninguna de las cinco salió muy contenta, pero aquí seguimos.

Mónica: La verdad es que nosotras no elegimos a qué grupo irnos. Hablamos cada una con nuestras monitoras sobre las preferencias y ellas, según eso y pensando donde encajaríamos, nos dijeron a donde ir. Yo creo que donde fuéramos íbamos a estar bien y solo era un trimestre así que había que probar.

Celia: Tampoco tuvimos elección (risas). Nuestras monitoras de rutas, Yanire y Edurne, nos pusieron a cada una en el grupo en el que mejor podíamos encajar y también por la cercanía. Aunque conmigo se columpiaron un poco porque de cercanía nada (risas).

Irati: En realidad no lo elegí. Mis monis me ofrecieron ir y yo dije que sí. Con dudas y algo de miedo ya que no conocía a casi nadie en Dendari. Es más, dude si seguir o no como monitora pero al final decidí probar y me encanto.

¿Cómo fueron los inicios en un nuevo grupo?

Ángela: El inicio fue raro, no difícil. Era nuestra primera experiencia como monitoras y yo no conocía a casi nadie del nuevo kraal. Si que notaba que había cosas diferentes que en Mikael pero me pusieron las cosas fáciles así que no me costó apenas adaptarme, y creo que ellos también lo vieron así (o eso espero). Un punto a mi favor era que había estado con l@s rutas de Baracea y sus monis en Seonee así que a alguien ya conocía y no empezaba completamente de cero.

Eva: A mí personalmente se me hizo muy duro. No estaba del todo a gusto, me costó entrar mucho, conocer a la gente, entrar en confianza cuando un grupo está formado es difícil, además echas de menos a tu gente, tus monis, la familia scout de toda la vida. Comparas muchas cosas. Es difícil empezar de cero. Decidí quedarme después de Navidad porque al campamento solo pude ir dos días y me parecía que no había intentado exprimir al máximo la experiencia, que no había entrado en dinámica. A lo largo del año iba compartiendo con Edurne mis pensamientos y no estaba convencida en la V Tropa. Hasta los Sanfermines estaba casi convencida de volver. Hasta que conocí Belagua y me tuve que quedar por lo menos un poco más.

Mónica: Los inicios fueron lo más difícil, como a cualquier sitio que vas nuevo, pero fui muy bien recibida por los monitores y chavales. Al principio es cuando más echamos de menos Mikael sobre todo cosas de los campamentos y a la gente. Lo que más pena me daba era ya no ver tanto a la gente de Mikael y sobre todo de mi rama y no poder vivir la experiencia de ser monitora con ellos.

Celia: Pues iba con muchos nervios ya que no conocía a todos los monitores de San Andrés y con los que conocía no es que me llevara muy bien… Pero desde el primer día que entré en el grupo me han tratado genial. He aprendido que las apariencias engañan, y que no hay que juzgar por pequeñas cosas, porque esas personas pueden llegar a ser muy importantes en tu vida. Además los chavales/as me acogieron muy bien y me sentí superintegrada en el grupo. Como si llevara allí toda la vida.

Irati: Al principio me daba bastante vergüenza y me costaba hablar, dar mi opinión… pero enseguida me sentí una más. Pensaba que iba a ser difícil seguir como monitora ya que estudio fuera de Pamplona y el no poder venir pensé que iba a ser un obstáculo para seguir en el grupo pero después de año y medio sigo y con muchas ganas.

¿Cómo os encontráis actualmente en vuestros grupos?

Ángela: Esta es un poco comprometedora, ¿Qué se supone que tengo que poner aquí? ¡Es broma! Muy agusto la verdad. Desde el primer momento me trataron muy bien así que no tengo ninguna queja.

Eva: Ahora mismo me siento muy agradecida con mis monitoras por haber decidido tomar aquella decisión. Quizás en su momento un poco forzada, pero sin duda beneficiosa y gratificante del todo para nosotras. Yo estoy ahora como en mi casa, he conocido y comparto los scouts con gente maravillosa; siempre recuerdas cosas, ves a los monitores y te da penita, pero mi familia scout se ha duplicado. ¡No podría pedir más!

Mónica: Actualmente estoy muy bien en Jairoi, estoy aprendiendo muchas cosas y realmente conforme he ido cogiendo confianza con la gente estoy cada vez más a gusto. Creo que he hecho amigos de verdad, he conocido gente de la que aprender y he vivido y estoy viviendo muy buenos momentos.

Celia: ¡GENIAL! Estoy muy contenta en San Andrés. La verdad es que tengo que agradecer a Edurne y Yanire por mandarme allí. Porque he aprendido un montón de cosas y he hecho grandes compañeros y amigos con lo que sé que pudo contar para cualquier cosa que necesite.

Irati: Muy agusto la verdad. Me gustaría estar más y participar más pero bueno intento ir a todo lo que puedo. He conocido a grandes personas y estoy aprendiendo nuevas cosas sobre el escultismo que no sabía.

Personalmente, ¿os ha merecido la pena el cambio?

Ángela: Creo que es una muy buena experiencia, muy enriquecedora y divertida que les recomiendo a todos los rutas que elijan seguir en el escultismo. Aprendes mucha cosas, conoces a otra gente, otra manera de trabajar, otras costumbres etc. Así que mi respuesta es sí, sí ha merecido la pena el cambio aunque por otro lado tu grupo de toda la vida es tu grupo de toda la vida…

Eva: Esta pregunta está a pillar... Sí y no. Claramente y sobretodo sí para abrir la mente, siempre cuando acabamos rutas solo pensamos en quedarnos en nuestro grupo, no vemos más allá, sin embargo, es algo que recomendaría sin dudarlo, al 100%. Conoces maneras diferentes de vivir el escultismo, gente nueva, maneras diferentes de trabajar, otros sitios y ‘costumbres’. Es de las experiencias más enriquecedoras que conozco, supongo que si no, no seguiría en este grupo. Esa pequeña parte del no es la de no haber podido disfrutar con mis compañeras de rama de toda la vida y con los monitores con los que veías y pensabas q estarías algún día, por no haber estado en tu grupo con tu pañoleta viviendo lo que se vive de monitor, que es bastante diferente. En ese sentido aún me sigue dando pena y nostalgia, pero volvería a hacerlo sin duda.

Mónica: Yo creo que si nos ha merecido la pena, aunque hayamos dejado de vivir cosas que hubiéramos vivido habiéndonos quedado en Mikael, un cambio siempre te hace aprender y mejorar y creo que todas hemos estado muy bien en nuestros grupos, y hemos conocido a mucha gente lo cual siempre es muy enriquecedor, y hecho amigos. Y por último, siempre se puede volver a Mikael para vivir la experiencia y recordar un poco lo vivido de chaval.

Celia: Me costó mucho tomar una decisión de si volver a Mikael o quedarme en San Andrés. Pero personalmente creo que tomé la decisión adecuada quedándome en mi actual grupo. Me ha hecho crecer más como persona, he aprendido cosas nuevas y otras maneras de trabajar, y pienso que al cambiarme de grupo puedo aportar más cosas porque muchas veces las veo desde otro punto de vista.

Irati: Pienso que estar en otro grupo es algo que debería de probar más gente ya que en cada sitio se trabaja de forma diferente y se pueden aprender y aportar diferentes cosas. Pienso que personalmente si me ha aportado mucho estar como monitora.

Nuestras protagonistas de hoy durante el San Jorge 2014

Y la pregunta del millón, ¿volveréis algún día a poneros la pañoleta de Mikael?

Ángela: Esta pregunta me da que pensar… Hace dos años cuando acababa la ruta me dije a mi misma que si o si mi etapa en los scouts acabaría en Mikael y es una cosa que espero hacer. Sin embargo, nunca sabes que te deparará el futuro así que cuando sepa la respuesta estaré encantada de responder. Lo que sí puedo decir es que sea cual sea la pañoleta que lleve, ¡la mochila está llena de buenísimos recuerdos!

Eva: La verdad es que siempre he pensado que acabaré mi etapa scout en Mikael, ojalá, aunque es verdad que nunca se sabe. Espero volver en un momento u otro, revivir lo mejor de mi etapa scout, tantísimos recuerdos, tantísimos buenos momentos, tantas personas, monitores/as…

Mónica: La verdad es que no se. Me encantaría volver alguna vez, porque hay muchas cosas que se echan de menos, pero la verdad que no tengo ni idea como me irá la vida. Por ahora quiero seguir en Jairoi y más adelante ya veremos. Pero me encantaría volver un tiempo.

Celia: Nunca he llegado a quitármela del todo, de hecho en mi pañoleta de San Andrés llevo un pin de Mikael que luzco muy orgullosa. He vivido grandes momentos en Mikael y le debo mucho al grupo. Sabe que puede contar conmigo para lo que sea. Pero yo tomé una decisión y creo que de momento no voy a cambiarla. Además sé que Mikael siempre tendrá las puertas abiertas para nosotras en el caso de que queramos volver.

Solo me queda agradeceros todo lo que me habéis aportado, sobretodo en mis últimos años en el grupo, que de una manera u otra me han hecho ser como soy ahora.

Irati: (Risas) Pues no lo sé, la verdad. ¿Quien sabe? La sigo teniendo colgada en la habitación, así que no digo que no me la volveré a poner. Al final tantos años en un grupo son muchos recuerdos, muchos buenos momentos vividos, amistades… Pero bueno pienso que al final la pañoleta es un trozo de tela, que lo que importa es el significado de llevar una, da igual que sea roja o naranja.

En la cima de la Mesa de los Tres Reyes


No hay comentarios:

Publicar un comentario